En la víspera de la Navidad de 1989, el cuerpo de un hombre llamado Richard Mallory fue encontrado en los bosques de Daytona Beach, en el estado de Florida. El cadáver tenía tres impactos de una pistola calibre 22.
Un año después, otros seis cuerpos asesinados en forma similar habían sido descubiertos. Todas las víctimas eran hombres de mediana edad que aparecieron muertos cerca de alguna ruta o camino. Todos habían sido robados y asesinados con una pistola calibre 22.
El FBI sospechó desde un comienzo que los crímenes habían sido perpetrados por una o dos mujeres con rasgos de asesinas en serie. El móvil de los homicidios, sin embargo, no estaba en absoluto claro.
En diciembre de 1990 se obtuvieron los primeros retratos hablados de la posible pareja de asesinas en serie. No pasó mucho tiempo antes que diversos testigos reconocieran en ellos a Tyria J. Moore, de 28 años de edad, y a Aileen Wuornos, de 34. Ambas vivían a la deriva en diversas localidades del estado de Florida y eran amantes.
Aileen Carol Wuornos había nacido en Rochester, Michigan, el 29 de febrero de 1956. Hija de padres adolescentes que se separaron meses antes de su nacimiento, Aileen quedó al cuidado de su madre, Diane, al igual que su hermano mayor Keith.
Pero la joven madre fue incapaz de criar a la niña, y en marzo de 1960, Aileen fue adoptada legalmente por sus abuelos maternos.
A los seis años de edad, en 1962, Aileen sufre severas quemaduras en el rostro cuando jugaba junto a su hermano y nueve años más tarde, queda embarazada de un padre que permaneció sin identificar, entregando a su hijo recién nacido a un hogar de Detroit.
En esos mismos días, Aileen y su hermano dejan la casa de los abuelos, y ella empieza a trabajar en la calle como prostituta.
En 1974, usando el alias de Sandra Ketsch, Aileen Wuornos es encarcelada en Colorado por conducta impropia, conducir ebria y disparar una pistola calibre 22 desde un vehículo en movimiento.
En 1976, de vuelta en Michigan, Aileen es arrestada en Antrim County por golpear la cabeza de un barman con una bola de billar. Pocos días después, su hermano Keith muere de un cáncer en la garganta y Aileen hereda los 10 mil dólares de su seguro de vida. Con el dinero, se compra un auto nuevo y viaja a Florida en busca de una vida mejor.
Sin embargo en 1981 Aileen cae de nuevo en la cárcel, esta vez en Edgewater, Florida, por robar a mano armada una tienda. Sale de prisión 13 meses más tarde, en junio de 1983.
Su siguiente arresto, en mayo de 1984, se debe al intento de cobrar cheques falsos en un banco de Key West. Siguen detenciones por conducir sin licencia, robo de coche, resistencia al arresto, obstrucción a la justicia y por amenazar a un hombre con una pistola calibre 22 para robarle 200 dólares.
Es a fines de 1986, que Aileen Wuornos conoce a Tyria J. Moore en un bar de Daytona. Ambas se hacen amantes, y cuando después de un año de tortuosa relación la pasión se desvanece, siguen siendo inseparables amigas.
De ahí en adelante las andanzas delincuentes de la pareja se multiplican con asombrosa rapidez. Aileen recurre a varios nombres falsos y junto a Tarya suman incidentes de todo tipo con la policía, desde conducir sin licencia hasta amenazas telefónicas a empleados de supermercado.
Por 1989, Aileen Wuornos es una mujer de carácter agresivo y fácilmente irritable, que viaja siempre con una pistola en su bolso y que trabaja en forma esporádica en bares y paradas de camiones.
El 30 de noviembre de ese año, un electricista de 51 años de nombre Richard Mallory, conocido por su afición al alcohol y a las mujeres, es visto con vida por última vez. Al día siguiente su coche es encontrado en Ormond Beach, junto a su billetera, documentos personales, una botella vacía de vodka y varios condones.
El 13 de diciembre de 1989, el cuerpo de Richard Mallory es hallado en los bosques cercanos a Daytona Bech con tres disparos en el pecho efectuados por una pistola calibre 22.
Esas pistas, sin embargo, no llevan a la policía a descubrir al culpable. El caso se archiva y permanece sin novedades hasta el 1 de junio de 1990, cuando un hombre desnudo es hallado muerto cerca de Tampa, con seis disparos de una pistola calibre 22. Cuando la policía lo identifica como David Spears, de 43 años de edad, ya ha aparecido un tercer cuerpo desnudo de un hombre de 40 años asesinado con nueve tiros de una calibre 22.
La cuarta víctima se llama Peter Siems y es un hombre de 65 años, que es visto por última vez cuando sale de su casa en Júpiter, Florida, para ir a visitar a unos parientes en Arkansas. Su coche aparece un mes más tarde, chocado y abandonado. Testigos cuentan a la policía que a bordo del auto iban dos mujeres, una rubia y otra de pelo castaño oscuro, y entregan información para realizar un retrato hablado. La mujer rubia iba herida, y una huella de su mano ensangrentada queda grabada en el auto.
Para noviembre de 1990, los hombres asesinados de forma similar en el estado de Florida ya son nueve. Los medios de comunicación siguen a estas alturas el caso de muy cerca, y presionan a las autoridades policiales para que asuman que se trata de dos asesinas en serie y publiquen sus retratos hablados, lo que ocurre a fines de ese mes.
En las tres semanas siguientes, la policía recibe cuatro llamadas teléfonicas que identifican a las sospechosas como Tyria Moore y Lee Blahovec (uno de los tantos pseudónimos de Aileen Wuornos).
Mientras, para obtener algo de dinero, Aileen sigue vendiendo los objetos de valor que ha robado a sus víctimas. Es así como el 6 de diciembre, vende la cámara y el detector de radar de Richard Mallory en Daytona, y parte a Ormond Beach a vender una caja de herramientas que pertenecía a Spears.
El 9 de enero de 1991, Aileen Wuornos finalmente es detenida en un bar de Harbor Oaks. Al día siguiente Tyria Moore es conducida a la casa de sus hermanas en Pennsylvania, y acepta colaborar con la policía.
El 16 de enero, Aileen confiesa seis asesinatos, y alega que todos fueron cometidos en defensa propia, pues esos hombres intentaban violarla. Antes de que terminara ese mes, ella y su abogado venden los derechos cinematográficos de su vida.
El 27 de enero de 1992, un jurado declaró a Aileen Wuornos culpable de homicidio en primer grado y recomendó la pena de muerte. El 30 de enero de 1992 Aileen Carol Wuornos fue sentenciada a morir ejecutada. La pena se cumplió en el otoño de 2002.